CAPITULO 14

Nicolás llego a su casa, devastado por el dolor de haber dejado a Eugenia, ahí lo esperaba Paula con su mano en su vientre.

--hoy fui al doctor…es una nena…-le dijo mostrándole la imagen en la ecografía

Al recordar las palabras de Eugenia que lo empujaban a permanecer a quedarse por el bien de su hija

--Nicolás yo…quiero que me entiendas…

--perdóname Paula, perdóname te juro que se acabó…Desde ahora en más voy a vivir para vos y para nuestra hija…y vamos a ser muy felices.

--en serio?....¿se acabó?....

Paula estaba emocionada.

--si -le interrumpió el

Sin querer que ni siquiera nombrarla

--ya está, es pasado, ven chiquita

La abrazo y le dio un tibio beso que para Paula fue suficiente, sabía que había ganado ¿pero había ganado? Nicolás se quedaría, su cuerpo estaría ahí día a día, pero su corazón, su alma estaban? Pasaría su vida a su lado y le cumpliría en todo, nunca le faltaría nada, pero su amor su amor se había quedado entre rejas, toda esa pasión que uno sueña con vivir, el fuego el todo o nada, sería solo un recuerdo, Nicolás no la buscaría más, no iría mas a verla, ni la nombraría nunca pero en su mente contaría los días uno a uno y Paula viviría con ese miedo de que en cualquier día, cuando estaba en silencio está pensando en ella, cualquier día lo podría perder, aunque él nunca se fue de su lado ni volvió a buscar a Eugenia.

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Mery toco la puerta de esa pequeña casa y ahí lo vio frente a ella, a ese extraño que conmovía su cuerpo, que era capaz de dejar todo y vivir con él, Peter la miraba sin entender a la joven.

--ya vinimos -le dijo

Él lo entendió al ella llevarse las manos al vientre, el solo sonrió. Mery se animaba abandonar la comodidad, la certeza por la incertidumbre, por la emoción de no saber qué va a pasar mañana, de despertarse cada día sin saber que le deparara el destino…dejaba todo atrás y empezaba a vivir.

Nicola se sorprendió al ver a Angie allí, parada en la puerta de su departamento.

--Angie?

--no debí haber venido, ya se, me equivoque, vos estas con Brenda…y vine yo, soy una tonta, pensé que podías perdonarme, vos tenías razón, mi papa el…soy una estúpida…

El la callo con un apasionado beso que sorprendió a Angie, sin dejar que siguiera explicando nada. Ella y Nicola decidieron vivir allá para olvidar y empezar de nuevo, eran visitados demasiadamente por su primo y su futura esposa Lali. A todos les sorprendió la noticia de su boda antes que la de los comprometidos Pablo y Lali. Para Angie fue un trámite fácil anular su matrimonio con Mario, el aún estaba preso pero estuvo de acuerdo porque apenas saliera quería oficializar su relación con Candela. Fue una boda hermosa Angie lucia sencilla, no necesitaba de nada más que su sonrisa para demostrar su felicidad.  

FIN.